El lago Bodensee o lago Constanza se encuentra entre La Selva Negra y sus casitas de cuento y la región de Baviera, famosa internacionalmente. El lago Constanza es cruce fronterizo, ya que sus orillas pertenecen a 3 países, Alemania, Austria y Suiza.
Se pueden conocer multitud de pueblos que rodean el lago. Para desplazarse existen multitud de ferries que funcionan muy bien. También puedes bordearlo en coche, o si estás en buena forma, una ruta en bicicleta es muy buena opción.
Como punto final a nuestro viaje por Francia, Alemania y Austria, aprovechamos para conocer alguno de los pueblos que se sitúan junto a este gran lago, en la parte alemana.
Lindau
Cuando se habla de Lindau, la mayoría de las veces se refiere a la pequeña isla que concentra la mayoría de los reclamos turísticos. Para acceder a ella, existe un puente donde se puede cruzar con el coche. Nada más entrar, hay dos parkings para dejar el coche y poder pasear por sus calles.
El punto más famoso de Lindau es la puerta de entrada al puerto por mar, compuesta por una torre-faro del siglo XIX y frente a ella, el León de Baviera. Se puede acceder a la parte alta del faro para ver una bonita vista de Lindau, así como del lago con las montañas suizas y austriacas de fondo.
En el puerto asimismo podemos ver la Mangturm Tower, que también permite subir a su parte alta.
Un edificio que también destaca y que se encuentra en el corazón de esta isla es el antiguo Ayuntamiento (Altes Rathaus) con una escalera exterior de madera y su fachada decorada con pinturas que no pasa desapercibida.
Friedrichshafen
El encanto de este municipio es muy diferente al del resto de los pueblos de alrededor. Friedrichshafen es industrial y aunque tiene un bonito paseo junto al lago con muchos bares y restaurantes, por lo que destaca es por su museo del Zeppelin.
La pieza central del museo es una reconstrucción de una sección de 33 metros del dirigible Hindenburg, que tuvo un incendio en New Yersey en 1937, muriendo 36 personas y que supuso el fin de los dirigibles como medio de transporte.
Junto al lago podemos visitar la iglesia del Castillo, con 2 torres de 55 metros de altura. Todo un hito en 1702 cuando se construyó, convirtiéndose en aquella época en la iglesia barroca más grande del Lago Constanza.
Paseando junto al lago, nos sorprendió una concentración de lanchas deportivas y clásicas que dieron glamour al paseo y al final de estos días inolvidables.
