El principal atractivo de la isla de Menorca son sus calas. Parece mentira que tengamos este paraíso tan cerca y muchas veces pensemos en el Caribe cuando nos hablan de aguas turquesas. Aunque varias personas que conocemos nos habían comentado las maravillosas playas que tiene Menorca, cuando visitamos la isla nos sorprendió muy gratamente. Hicimos coincidir nuestros días en la isla con sus míticas Fiestas de San Juan, y fue todo un acierto.

De entre toda la cantidad de playas y calas que tiene la isla, vamos ha hacer un listado con las que para nosotros son las 12 mejores calas de Menorca y que si estáis pensando en visitar la isla, no debéis perderos:

1. Macarella y Macarelleta

Estas dos calas son las Top de Menorca. Son las más famosas. Las colocamos en un mismo punto porque se encuentran una junto a la otra, separadas por un pequeño sendero.

Están situadas en el municipio de Ciutadella y tienen todos los factores para poderse definir como calas vírgenes: arena blanca, aguas turquesas y rodeadas de pinares casi hasta la misma orilla.

El punto negativo por ser tan famosas es que están muy masificadas. Los accesos en temporada alta están restringidos y solo se puede ir en autobús. Se coge en la entrada a Ciutadella, en la Vía Perimetral, donde paran muchos autobuses. Si no os alojáis en Ciutadella, podéis dejar el coche justo en frente de las paradas de autobús en un parking público de tierra. Nuestra recomendación es que madruguéis y visitéis primero Macarelleta ya que es más pequeña y cuando notéis el agobio, os mováis a la grande. Nosotros cogimos uno de los primeros autobuses y nos encontramos con Macarella vacía y Macarelleta con muy poca gente. Algo increíble pensando que visitamos la isla en plenas Fiestas de San Juan.

2. Mitjana y Mitjaneta

Otra pareja de calas con características idénticas. La tonalidad de las aguas resulta increíble. Desde estas calas se puede ir por senderos a alguna otra cala que tiene peores accesos con el coche, así que podéis optar por pasar el día tranquilo en estas dos calas o bien, visitar alguna otra más. El parking es gratuito y está a 3 minutos de la playa.

3. Cala en Turqueta

Su nombre lo dice todo. Aguas azul turquesa con una intensidad desmesurada. El parking está a 10 minutos. Se llega por un pequeño sendero, donde los árboles casi no dejan ver esta bonita cala, pero cuando el bosque se abre, la estampa es inigualable.

Como en muchas calas del sur de la isla, se pueden visitar algunas calas vecinas recorriendo un camino. Nosotros recomendamos Cala des Talaier. El sendero comienza subiendo unas escaleras a mano derecha según miras al mar, que están situadas unos metros antes de llegar al puesto del socorrista.

4. Cala des Talaier

Nuestra llegada a esta cala fue andando desde Cala en Turqueta, aunque también se puede llegar desde Son Saura. La distancia es similar, en torno a 1 km.

Es Talaier es una de las calas más recónditas de Menorca. Una de las características de Es Talaier es su poca profundidad, lo que hace posible adentrarse en el mar y seguir haciendo pie.

5. Cala Pregonda

Situada en el norte de la isla, esta playa es muy distinta al resto de las que nos podremos encontrar en Menorca. Su arena es de color rojizo. Para llegar hay que andar unos 2 km, pero merece mucho la pena la caminata para disfrutar de esta espectacular cala.

Es importante revisar el tiempo antes de ir, ya que aunque la playa está protegida del viento por los islotes que hay frente a la cala, la tramontana puede provocar fuerte oleaje.

6. Cala Presili y cala Tortuga

Estas dos calas vecinas se encuentran en la zona este de Menorca, vigiladas por el faro de Favàritx. Son de arena blanca y fina y tienen unas aguas cristalinas. Suelen estar muy tranquilas ya que para llegar hay que andar un poco.

Para acceder hay que dejar el coche en el parking que hay a 2 km del faro. Cuando llevéis andado 1 km, hay un desvío a mano derecha junto a unos paneles del Cami de Cavalls y desde ahí hay que andar otro kilómetro para llegar a cala Presili. Si queréis visitar cala Tortuga, hay que seguir andando otros 700 metros. Recordad llevar buen calzado y bastante agua, ya que en la playa no hay servicios.

También se puede ir en autobús lanzadera desde Mahón, que os dejará en el desvío de los paneles, así os ahorraréis andar 1 km.

7. Cala’n Brut

Nuestra favorita. Ideal para los que no les gusta la arena de la playa, pues esta estrecha cala no tiene arena. Para dejar la toalla hay diferentes plataformas.

Desde alguna de estas plataformas se puede saltar al mar y si no sois tan atrevidos, hay instaladas escaleras para poder acceder al agua. Al estar tar recogida, casi no hay oleaje y permite practicar snorkel y ver abundantes peces tranquilamente.

8. Cales Coves

Son un conjunto de calas protegidas por unos impresionantes acantilados. Las zonas de arena son bastante pequeñas, lo que hace que tampoco sea una cala muy masificada. Los acantilados hacen que parezca una piscina, incluso en días de viento.

A parte de sus tranquilas aguas, otro de sus reclamos son sus cuevas. Hay casi 100 y fueron utilizadas como necrópolis en la Edad Media.

9. Cala Galdana

Es una de las playas más conocidas de Menorca y una de las más frecuentadas, sobre todo por turismo familiar. Su forma de concha y situada entre acantilados hace que sus aguas sean muy tranquilas. Tiene todo tipo de servicios como alquiler de hamacas, bares y restaurantes o alquiler de kayaks.

Para disfrutar de una bonita vista de cala Galdana se puede subir a su mirador situado al final de la avenida Sa Punta.

10. Caló Blanc

Es una de las calas más pequeñas de la isla, teniendo una minúscula zona de arena, donde el largo es mayor que el ancho de la arena. Pese a este factor, es una de las más bonitas y más conocidas. La cala está rodeada por formaciones rocosas donde se puede estirar la toalla y pasar un estupendo día de playa. Posee unas aguas turquesas que sorprenden según estás llegando.

11. Playas de Son Saura

Son dos largas playas, aunque casi todo el mundo se refiere a ellas como Son Saura. Las dos playas que podemos visitar son playa de Banyul y la de Bellavista. Tienen un amplio parking situado a 500 metros de las dos playas.

Playa Banyul es la primera que os encontráis según venís del parking. Mide 200 m de largo, pero casi siempre está vacía ya que en su orilla se acumula mucha posidonia (algas).

La inmensa mayoría va directamente a playa Bellavista. Mide 310 metros de ancho. En sus aguas también se puede acumular algo de posidonia que puede resultar molesto para algunos turistas, aunque nosotros nos la encontramos casi limpia excepto en alguna zona. Cuando te metes al agua es difícil llegar donde cubre, lo que también la hace perfecta para las familias con niños.

Como curiosidad, la visitamos por la tarde y a la hora de merendar pasó un chico vendiendo fruta. Ofrecía unas rodajas de sandía inmensas, con una anchura como nuestros hombros. Buenísima e ideal para refrescarse.

12. Cala de Trebalúger

Es una playa aislada y de difícil acceso a pie. Para llegar, la mejor opción es dirigirse a cala Mitjana y desde allí recorrer 1,5 km hasta esta playa. Gracias a que para llegar hay que hacer una buena excursión bajo el sol, es posible encontraros en pleno verano Trebalúger sin mucha gente.

Como recompensa al esfuerzo, llegaréis a una enorme playa salvaje con una curiosidad única en la isla, en ella desemboca un pequeño río.